Un PABX, o Private Autonomous Branch Exchange, es preferido por las empresas porque es un sistema de conmutación telefónica automatizado y autogestionado. Por ejemplo, la relevancia de esta tecnología puede verse en el contexto de distribución automática de llamadas, reenvío de llamadas y correo de voz. Los sistemas PABX, al igual que otros sistemas automatizados, permiten la comunicación multicanal, que puede extenderse aún más a personas fuera de la empresa. En un entorno de oficina ocupada, un sistema PABX transfiere un gran volumen de llamadas rápidamente y con precisión a los destinatarios objetivo. El servicio al cliente y las relaciones también se benefician de otras automatizaciones de procesos empresariales; por ejemplo, el sistema PABX puede integrarse con sistemas CRM para mejorar la calidad del servicio y la comunicación. Debido a su eficiencia en habilitar la comunicación y la difusión de información, es una herramienta importante para la gestión de la comunicación en todos los tipos de empresas, independientemente de su tamaño.